As a pastor from Georgia, when I think about the effect that this pandemic has had on our state, all I can say is that it is a heartbreaking, low-down, dirty shame. The truth is this: even though there have been many people of goodwill who have stepped up to do marvelous things to protect those in their communities, and to try to protect themselves and their families, those who have been responsible for the distribution of resources and care have been negligent and have not acted responsibly. In particular, I’m talking about our state government, which has put our people in danger, and in many ways has not adequately made sure that the communities that most need it find the resources that have been made available.

Too many people, and particularly essential workers, most of whom are people of color, have been put in harm’s way for the sake of the economy and for the sake of profit. They have not been protected and have not been given what they need to do their jobs safely. Meanwhile, the houseless and those who are incarcerated, who continue to be affected by this pandemic, have been rendered invisible by all the executive orders and public policy because they are not named or considered in them. When I see that all I can say is that is a low-down, dirty shame. That is a negligence of your duty as elected officials who are given responsibility for the care of people.

But even in the midst of that, I am a person of faith. I’m a Christian, and my scriptures tell me that even as you have done it to the least of these, the most vulnerable, you have done it to me. And I have seen so many people of faith step up, people of good will do great things for people in their communities most in need. Thank goodness for them, as together we are being the hands and feet of God in our communities, for Lord knows, our elected officials in Georgia are not.

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Rev. Billy Michael Honor
Director of Faith Organizing
New Georgia Project


Como pastor de Georgia, cuando pienso en el efecto que esta pandemia ha tenido en nuestro estado, lo único que puedo decir es que es una vergüenza verdadera, sucia, que rompe el corazón.  La verdad es esta: aunque ha habido muchas personas de buena voluntad que han puesto de su parte para hacer cosas maravillosas a fin de proteger a las personas en su comunidad, y tratar de protegerse a sí mismos y a sus familias, las personas responsables por la distribución de recursos y cuidado han sido negligentes y no han actuado con responsabilidad. En particular, estoy hablando de nuestro gobierno estatal, que ha puesto en peligro a nuestra gente, y de muchas maneras no ha asegurado adecuadamente que las comunidades que más necesitan encuentren los recursos que se han puesto a la disponibilidad.

Demasiadas personas, y particularmente los trabajadores esenciales, la mayoría de los cuales son personas de color, se han puesto en peligro por el bien de la economía y por el bien de las ganancias.  No se les ha protegido, y no se les ha dado lo que necesitan para hacer su trabajo con seguridad.  Mientras tanto, las personas sin casa y las que están encarceladas, que siguen siendo afectados por esta pandemia, se han vuelto invisibles por todas las órdenes ejecutivas y las políticas públicas porque no están nombradas ni consideradas en estas. Cuando yo veo eso, lo único que puedo decir es que es una vergüenza verdadera y sucia. Esto es una negligencia de su deber como funcionarios electos a quienes se les otorga la responsabilidad de cuidar al pueblo.

Pero aún en medio de todo eso, yo soy una persona de fe. Soy cristiano, y mis escrituras me dicen que cuando lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, los más vulnerables, a mí me lo hiciste. Y he visto a tantas personas de fe aceptar el reto, personas de buena voluntad hacer cosas grandiosas para las personas en sus comunidades de mayor necesidad. Gracias a Dios por ellos, ya que juntos somos las manos y los pies de Dios en nuestras comunidades, ya que, sabe Dios, nuestros funcionarios electos en Georgia no lo son.

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Rev. Billy Michael Honor
Director del Trabajo Organizador de Fe
New Georgia Project